Disculpe, ponles unas frases, que hoy invito yo.
Moura
Disculpe, ponles unas frases, que hoy invito yo.
Moura
Tengo su cacao en mis labios
y extraño
lo extraño de sus ronquidos.
Hace tiempo que no la escucho.
De noche.
Suspirar,
inspirar,
expirar.
Gemir.
Y me invento
y lo reintento,
y me vuelvo a inventar,
porque cerrar los ojos y no verla al abrirlos,
porque verla más en sueños que despierta…
Ya no es que duela,
es que prefiero no dormir
a hacerlo sin ella.
Moura
A tus pies:
He empezado a dormir con calcetines
porque os habéis ido a otra cama.
No hay caricias de buenas noches.
No hay caricias de buenos días.
No.
Hay.
Caricias.
Ya ha oscurecido,
es hora de volver a casa.
Moura
Es por tu belleza
y por mis ganas de más.
No sé cerrar los ojos
sin ver los tuyos,
ni verte sonreír y que no
se me curve la boca.
Mira al cielo.
La noche está
más bonita de lo normal.
Y tú tienes la culpa.
Moura
Temblar por dentro
y por fuera.
Cuando no sabes temblar de otra forma.
Cuando sabes por qué tiemblas.
Cuando se te cae el café,
la ceniza,
y el alma,
al suelo.
Cuando no es por frío
sino por ausencia.
Cuando te tiembla el habla.
Cuando te tiembla el pulso.
Cuando te tiembla el quinto cigarro seguido.
Cuando te tiembla la sexta lagrima
y cae temblando entre tus labios.
Cuando lo único que haría que dejases de temblar
se ha ido
y no tiene intención de volver.
Moura
He dejado de contar kilómetros.
Lo que nos une
no entiende
de geografía.
Moura
Ya sabes cómo funciona.
Es el montón de almohadas
en tu lado de la cama
para no sentir el frío.
Es llenar de huellas la vida,
para que la huida
parezca
que duele menos.
Ya sabes cómo funciona.
Es cerrar fuerte los puños
y que ni siquiera el aire
tenga algún vacío
por el que colarse para herir.
Moura
Me encanta mirar(te).
Y con miradas como la tuya
son necesarios los terremotos
para contrarrestar
el temblor de mis piernas.
Me encanta robar(te).
Y me pasaría la vida
cogiendo sin permiso
todos los momentos que veo,
cuando piensas
que no te veo.
Moura
Aplícate.
Háblame tú.
Salúdame.
No sé.
Coge un metro y ven a verme.
Hazme el amor.
Que yo tengo un lastre atragantado
y un par de errores entre las costillas.
Y no me puedo (quiero) mover.
Moura
No sé por dónde empezar.
O si hay algo que empezar.
O si empezar por recordar(me)
que todo se ha terminado.
Moura